Dispersos por todo Estados Unidos, la familia Herrieg eligió el idílico paraíso de Cancún como destino de su reunión. Ansiosa por preservar los recuerdos de esta reunión especial, Shelly, un miembro de la familia, me confió a mí, un fotógrafo familiar de Cancún, la tarea de documentar su alegría.
Our session unfolded at the stunning Riu Peninsula Hotel. The turquoise waters, resembling a pristine pool, provided a breathtaking backdrop for the photoshoot. The serene atmosphere perfectly complemented the family's joy and togetherness as they reconnected after time apart.
La risa, el amor genuino y los momentos preciados llenaron el aire mientras la familia Herrieg disfrutaba de su reencuentro. Su vínculo y felicidad fueron palpables durante toda la sesión. Fue un honor documentar estos momentos especiales, capturando la esencia de su familia reencontrándose en el paraíso.
Las fotografías resultantes encapsulan hermosamente la magnificencia tanto del lugar como de la conexión familiar. Estos recuerdos atemporales garantizarán que la familia Herrieg pueda conservar para siempre los recuerdos de su inolvidable reunión en Cancún.
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